lunes, 22 de junio de 2020

La vida sigue, el amor también


Y la vida siempre sigue, a cada paso, a cada amanecer,
a cada Primavera, a cada luna, a cada amor, a cada
desamor, a cada encuentro y a cada desencuentro...
La vida sigue, ella no cambia, cambiamos nosotros,
ya no somos los mismos. Somos cada vez más o somos
cada vez menos. Somos tal vez menos impetuosos,
más sosegados, o tal vez menos equivocados.
La vida siempre sigue, nosotros también, hasta que
dejamos de seguir. Tal vez quedarán los recuerdos
de lo que fuimos y de los lugares donde estuvimos,
transformados, eso sí, porque todo acaba transformándose,
como la energía.
Cada cual tiende a volver a los lugares donde estuvo
enamorado. Posiblemente, algún día, el espíritu también,
porque el amor nunca se olvida.

© José L. Asensi  22/06/2020

 


 




domingo, 14 de junio de 2020

Solidaridad y ternura

La solidaridad es la ternura de las personas,

una ternura que traspasa fronteras, colores,

ideas. Una ternura que es la defensa de un

valor fundamental esencia de lo humano,

que es la demostración del afecto por el

prójimo, de la emapatía, la comprensión,

la compasión… Es la sensibilidad que hace

que nuestro corazón se sienta más cerca de

los demás.

Es la mano tendida hermano con hermano

en ese hermoso caminar que es la vida y a la cual

todas las personas tenemos derecho.

Es la condición necesaria para compartir este planeta.

Es lo contario del miedo, del egoísmo, de la destrucción,

de la competencia y la herramienta necesaria

canto a la libertad y exclusión de la manipulación.

La solidaridad es la necesidad de compartir la

luz del sol cada día, es el horizonte donde mar y

cielo se unen, el calor de una sonrisa y el apoyo

de una palabra amable. Sin ella, una piedra podría

ser más humana que nada.

 

© José L. Asensi    14/06/2020


 

 

sábado, 6 de junio de 2020

Una canción

Una canción es un pedacito del alma, de tiempo, de recuerdo,
un fragmento de nuestra vida.
Las canciones, la música, alguna melodía que tararear, nos acompañan
durante toda nuestra vida, cuentan siempre algo de nosotros: amores,
desamores, tiempos felices, vacaciones de verano, nuestra niñez,
nuestra adolescencia o cualquier otra época o situación, generalmente agradable,
porque una canción, su letra, su música, nos trae al recuerdo vivencias. Tales como
nuestro primer baile pegados, nuestro primer beso, nuestro primer amor, cosas que vivimos 
plenamente cada día, algún acontecimiento, algo que dejó huella en nuestra mente 
y en nuestra alma.
Por eso la música siempre nos acompaña y genera en nosotros estados de ánimo, emociones, sensaciones...
Nos acaricia como una suave mano invisible, nos transporta y cómo no, nos sigue
cuando amamos a corazón abierto y con las sensaciones a flor de piel.
Es como un baúl de los recuerdos en el tiempo, un recorrido por nuestra vida
en forma de pétalos de rosa que adornan nuestros mejores momentos y los perfuman
para que no los olvidemos.

© José L. Asensi    06/06/2020