Las golondrinas vuelan y vuelan,
surcan el viento,
cruzan con sus cabriolas
un cielo dorado, añil y rosa
cuando el sol se va poniendo,
surcan alegres el tranquilo atardecer
regalando proezas,
proezas de alas y vuelos.
Enfrente de mi el mar,
a mi espalda el sol se va durmiendo.
Es el espectáculo de la naturaleza,
ese regalo de paz, belleza que en su cenit
se va meciendo.
Es el momento de la introspección,
de un calmo embebimiento,
y tal vez de la añoranza,
de un amor que fue
y que aún sigue existiendo.
Vuelan las golondrinas y con ellas
lejano el pensamiento.
© José L. Asensi 12/07/2021
Desde el famoso poema de Gustavo Adolfo Bécquer las golondrinas las percibo como poemas que vuelan.
ResponderEliminarHoy aquí otra vez.
Saludos.
Ese poema de Bécquer es inmortal.
ResponderEliminarMuchas gracias por haber percibido en las golondrinas este poema.
Saludos, amigo.
A analogia entre andorinhas e o mar é sublime. A andorinha é uma ave tão meiga e querida que emociona só de a olhar. O Mar é igual. Gostei muito de ler.
ResponderEliminar.
Cumprimentos
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Pensamentos e Devaneios Poéticos
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Dos figuras bellas y evocadoras de versos.El siempre inmenso azul y las golondrinas de cuentos y poemas.
EliminarMuchas gracias Ryk@rdo.
Saludos.
Sin duda durante la contemplación del natural (aunque no cualquiera sabe haberlo) logras detectar y luego delinear las "proezas de alas y vuelos" de las golondrinas surcando el cielo a la par que haces realidad el ideal del Poeta: ser además un buen pintor de metáforas y versos...
ResponderEliminarAbrazo una vez más sin sombrero, José Luis.
Muchas gracias Carlos. Tus palabras son halagadoras. Y algo importante es poder compartir esas sensaciones que provoca la contemplación de lo que el verso quiere transmitir.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amigo.
Peaceful imagery, a beautiful poem!
ResponderEliminarThanks a lot, Bill.
EliminarOpino en este caso igual que Toro, ya sabemos que las comparaciones son odiosas; más en este caso, tus innovadores versos surgen un efecto muy similar al poema inmoratal de Bécquer, José Luis.
ResponderEliminarPor otra parte, decirte que puedes pasar por mi blog, ya que tienes una sorpresa.
Gracias por todo. Un abrazo y feliz semana !!!
Muchas gracias Joaquín. Me alegra que opines así.Es un gran honor, porque al gran Bécquer y su poema inmortal, nada ni nadie se le puede ni acercar. Es todo un símbolo para las generaciones anteriores y venideras.
EliminarMe pasaré luego por tu blog, por el que pensaba pasarme al ver la entrada actualizada, pero quería contestar antes vuestros comentarios.De antemano, gracias.
Un abrazo.
Hay lindas aves pero las golondrinas tiene esa magia o divinidad que las tenemos en muy buen estima es verlas y pensar suerte voy a tener jj ., Un bello poema nos dejas y pensando en el regreso de ellas como dice el poema de Bécquer.
ResponderEliminarAbrazos!!
Son lindas aves, se les han dedicado muchos poemas y hasta bonitos cuentos "El príncipe y la golondrina"
EliminarMuchas gracias, Campirela.
Abrazos, amiga.
Vuelan las golondrinas y con ellas
ResponderEliminarlejano el pensamiento.
Esto es amor...y quien lo probó lo sabe.
(L d V)
Me ha encantado el poema como me encantan las golondrinas.
Un beso enorme.
Muchas gracias, Moony. Quien lo provó lo sabe.Con esa frase has entendido a la prefección la esencia del poema.
EliminarBeso gigante.
Wowwww mi amigo Jose, solo me queda
ResponderEliminaraplaudirte de pie, bravoooooo.
Besitos dulces
Siby
Muchas gracias,Siby.
EliminarBesos.
Hermoso poema donde las golondrinas vuelan como el pensamiento poetico. Saludos amigo.
ResponderEliminarMuchas gracias Sandra.
EliminarSaludos, amiga.
Muy hermoso poema, José Luis, de un poeta que como tú sabe disfrutar de esos detalles que nos ofrece la naturaleza, y que nos inspiran para escribir versos escogidos como los tuyos. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Ingrid.
EliminarLa naturaleza es amor, como todo ese gran regalo de la vida que podemos contemplar cada día.
Un abrazo.
Hermoso poema amigo amigo mío, las golondrinas se prestan a tanto son siempre poesía en movimiento. Un placer leerte José Luis.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y buen resto de semana.
La verdad es que con sus vuelos y acrobacias, con su fragilidad y al mismo tiempo fortaleza y perseverancia, son animales entrañables, que vuelven cada año, durante su vida.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amigo Juan.
En ese vuelo, Jose Luis, de las golondrinas en tránsito hacia mejores ámbitos, tu pensamiento enlaza cual danza de tiempo que se escapa a la dicha, a la presencia activa, de ese ser al que entregar la vida…
ResponderEliminarUn abrazo
Muy buena observación, ya que la golondrina ha sido asociada en alguna época al devenir del tiempo y esa dicha que vuela con él.
EliminarGracias.Un abrazo.
Jose, tu espíritu se hace golondrina disfrutando de ese atardecer en que el tiempo se para; sobrevuelas la realidad, te haces mar y sol sopesando el sentimiento. Ese sentimiento humano y divino, que trasciende, crece y se hace infinito...
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo entrañable por la grandeza e inmensidad que nos trasmites, amigo.
Muchas gracias, Mª Jesús.Los atardeceres son una auténtica delicia. Una transición armónica entre el día y la noche, y las golondrinas se bañan en él, con sus acrobacias que se dibujan en ese cielo de colores y luz cambiantes. Y en ese acontecimiento, el espíritu, en su más absoluta calma, se asoma y libera para unirse a la belleza del momento. Cuan infinita e inmensa es esa palabra, espíritu...Una luz infinita que nunca se apaga.
EliminarMi agradecimiento y mi abrazo entrañable hacia ti.
Muy hermoso José. Un poema con una belleza paisajística en los cielos, decorada con esos atardeceres llenos de colores cuando el sol se va escondiendo. Un bello canto a ese momento de la naturaleza donde las golondrinas en este caso son las protagonista.
ResponderEliminarMe gusto mucho leerlo.
Un abrazo.
Esos atardeceres dorados junto a esos cielos cambiantes son mi debilidad. Las golondrinas los acaban de adornar con su vuelo alegre y atrevido.
ResponderEliminarMuchas gracias, Elda.
Un abrazo.
Preciosos versos! Me ha gustado mucho su lectura.
ResponderEliminarBesicos.
Muchas gracias, Galilea.
EliminarBesos.
Bello poema un poco triste mando un beso
ResponderEliminarGracias, Alexander.
EliminarUn beso.
El pensamiento vuela y se eleva, hay añoranza en el poema, y una bonita esperanza que expresa vida y belleza.
ResponderEliminarBesos.
Los dos sentimientos vuelan a veces juntos.
ResponderEliminarGracias, Amapola.
Besos.
Esas golondrinas se hacen inevitables mensajeras a tus pensamientos.
ResponderEliminarBello poema amigo, un abrazo.
Muchas gracias, Agapxis.
EliminarEllas los transportan lejos.
Un abrazo, amigo.
Muy hermoso, José Luis, te felicito.
ResponderEliminarAbrazos.
Muchas gracias, Vero.
EliminarAbrazos.
Una abstracción muy pictórica acompañan en esta ocasión este bello poema. Bonito post.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas gracias, Jesús.
ResponderEliminarSaludos.
Una estampa has pintado con tu sentir, con esa nostalgia que se vuelve introspeccion y clama frente a un paisaje de ensueño...Una belleza de poema José...es como estar alli... Besos y feliz fin de semana
ResponderEliminarLas golondrinas son animales que crean ese paisaje, adornándolo con sus vuelos.
EliminarMuchas gracias, Eli.
Besos y feliz Domingo.
Hermosa imagen y magnífico poema consagrado a tan bello animal. Que pase un feliz domingo Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias José Ramón.
ResponderEliminarFeliz Domingo.
Saludos.
que bonita entrada llena de vida
ResponderEliminarGracias, Mucha.
ResponderEliminarSaludos.