o son veinte los abrazos,
o multiplicados los besos por dos,
o tan inmensos los lazos,
delirio que envuelve, arrullando,
las palabras de amor.
Han dado las once en la torre del reloj;
pero el tiempo no existe, cuando el tiempo es el amor;
la luna mira curiosa, bañándonos con su dulzor.
Han dado las doce en la torre del reloj;
pero el tiempo no importa, solo este momento, tu y yo.
Noche, luna, estrellas...
© José L. Asensi 15/03/2023